miércoles, 31 de julio de 2013

En busca de la Verdad

Me comprometí mucho con el estudio de ciertas cuestiones, como el ambientalismo, la realidad dibujada a través de los medios, los contenidos Illuminati de la educación, los efectos de la corrupción gubernamental sobre la sociedad, etc., pero ahora se ha planteado un tema al  que nunca accedí, y confieso que lo desconocía, tal es la existencia de un Catecismo de la Iglesia Católica. Tomé la comunión, también algunos de mis hijos, y el catecismo que nos fue transmitido fue verdaderamente bochornoso, de modo que me quedé con esa idea respecto a la Iglesia Católica, como a tantos otros les habrá pasado.

Habrán escuchado eso de "Dios es Amor"; si le arrimamos ejemplos esa afirmación queda muy mal parada. Traté de reproducir alguna foto de Internet bajo el título de "asesinato" y al final opté por no hacerlo, porque "Dios es Amor" quedaría completamente descalificado.

Pero en efecto, creo que lo que sucede con el Catecismo y la transmisión de principios católicos es que están muy mal redactados y mucho peor expresados.
Voy a intentar corregir los fallidos términos, para alcanzar la intención de la propuesta.

Lo que se intentaría decirnos es que hay una creación, de la que somos parte. El Amor no es un accidente químico dentro de esa creación. Digamos que así como existe una Inteligencia Superior que regula todos los fenómenos, existe un Sentimiento Superior, que lo permea todo.

Si nosotros, los humanos, tenemos inteligencia, es porque somos parte y efecto de esa creación. Y otro tanto para el amor que podemos llegar a sentir.

Ese Amor Abstracto que lo invade todo es lo que impulsa al Bien. Esa protesta permanente en busca del Bien es producto y consecuencia de la exigencia del Amor.

El problema es que es posible elegir, siempre en base a causas o provocaciones previas, buscar y practicar el Amor, o su enemigo, el Odio.

O sea que hay, o habría, conductas y procedimientos que causan Odio, y conductas y procedimientos que estimulan el Amor.

De modo que si bien hay quiénes no quieren admitir la existencia de Leyes Naturales, ni de Verdades Absolutas, tendrán que aceptar que todo lo que induce al Odio es Malo, y lo que Induce al Amor es Bueno.

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